El pasado mes de enero, los bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios (CEIS) llegaron a un acuerdo con el Consejero de Transparencia, Seguridad y Emergencias en la Región de Murcia, Antonio Sánchez Lorente (Partido Popular), por el cual se publicaría una oferta pública de entre 50 y 60 nuevas plazas. El 25 de abril se alcanzó la fecha límite pactada entre los trabajadores y la Consejería para la oficialización de la oferta de empleo, y ante el incumplimiento del tratado por parte del Consejero, los trabajadores de la Sección Sindical de CGT del CEIS han realizado un llamamiento a la movilización.

¿Qué reclaman los trabajadores?

La corta plantilla de bomberos del CEIS está provocando el cierre de parques al carecer de personal suficiente para su funcionamiento. Durante años, para suplir la actividad exigida para la plantilla, los trabajadores se han visto obligados a recurrir continuamente a la realización de horas extras. Con el aumento del número de trabajadores, no solo se conseguiría mejorar notablemente las condiciones laborales de la plantilla, sino que se permitiría asegurar más eficazmente uno de los servicios públicos de mayor importancia. Por el momento, el cierre del parque de San Pedro del Pinatar (quinto municipio en número de salidas) ha dejado a más de 20 minutos el parque mas cercano.

¿Cuándo se realizarán las próximas movilizaciones?

La primera movilización se realizó el pasado 9 de mayo en San Pedro del Pinatar. La próxima tendrá lugar mañana, 11 de mayo, frente a la Asamblea Regional en Cartagena a las 10:00 AM. Además, este mismo miércoles los trabajadores debatirán en asamblea la posibilidad de instaurar una huelga con carácter indefinido.

El Capital contra los servicios públicos

Mientras que uno de los sectores más importantes para el pueblo trabajador y que más conciencia de clase ha demostrado tener históricamente se encuentra en estas condiciones de precariedad, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FFCCSE), cuya tarea primordial pasa por reprimir a la clase obrera y defender a la burguesa, son tratados cuidadosamente por todos los Gobiernos y partidos políticos del Régimen. Desde el Partido Popular a Unidas Podemos, pasando por el PSOE, no han dudado en aumentar el número de policías y en mejorar sus condiciones laborales con tal de mantener satisfechos a quienes otorgan la estabilidad y seguridad necesaria para que los explotadores sigan explotando.

Los dirigentes políticos del capitalismo se antojan incapaces de ofrecer siquiera el personal reclamado por la plantilla, dejando en evidencia el deterioro cada vez más acusado de los servicios públicos gestionados bajo intereses privados. Pero sería ilusorio por nuestra parte suponer que una cara más amable del capitalismo supondría una mejora en la gestión con respecto a la derecha política. Las raíces podridas del Capital se extienden más profundo de lo que ninguna organización política puede llegar. La única solución posible pasa por arrancarlas y mandarlas al vertedero de la historia.

Bruno Daimiel